El ajo se utiliza para estar sanos y combatir parásitos intestinales, para tratar la hipertensión arterial y prevenir los problemas circulatorios, para el tratamiento del colesterol alto, las anginas, la tos y el exceso de ácido úrico.
Esta planta es originaria de Asia y su cultivo se ha extendido por todo el mundo. Ingerido crudo ayuda a reducir la acidez de estómago. Tiene propiedades antisépticas, antibiótico y antifúngico. Es antioxidante y descongestivo.