El karité actúa como potente agente protector y regenerador de cabellos secos, estropeados o dañados por el sol. Masajearemos aplicando directamente el karité. Luego se envuelve la cabeza con una toalla húmeda durante 15 minutos. Posteriormente, lavaremos el cabello. Sobre el pelo se puede aplicar como un bálsamo capilar o como abrillantador después de que esté seco. La manteca de karité restaura la estructura capilar, aportando brillo, suavidad y volumen.