Cuando una persona decide convertirse en vegetariana, considera una enorme cantidad de alimentos que se volverán significativos en su vida. Así y todo, muchas veces no lo hace impulsada por la necesidad o intención de vivir más, aunque de acuerdo a los estudios más recientes, se trata de uno de los principales beneficios que obtienen quienes deciden vivir su vida de esta forma.
Básicamente, un informe reproducido por la revista “JAMA Internal Medicine”, indica que el ser vegetariano influye sobre el cuerpo humano de modo que “reduce el riesgo de ciertas enfermedades y algunas dolencias”, lo cual de todos modos es propio de aquellas personas que comen las cantidades necesarias de frutas y verduras por día, reduciendo la ingesta de carnes rojas, dulces, etc.
De este modo, aunque no podemos afirmar específicamente que el ser vegetariano hace que las personas vivan más tiempo, sí es un hecho que quienes deciden este tipo de alimentación lo hacen porque se encuentran más preocupados por la relación que mantienen con su cuerpo, y de esta misma forma, se interesan en llevar a cabo rutinas de ejercicio y demás. En conclusión, que los vegetarianos viven más, pero no por ser vegetarianos en sí.
Por cuestiones propias del tipo de alimentación que mantienen, además de otros cuidados relacionados por ejemplo con el entrenamiento, como mencionábamos antes, los especialistas han llegado a la conclusión de que el riesgo de muerte en los vegetarianos era un 12% menor que en los omnívoros.
De hecho, otra demostración de que el vegetarianismo influye en demás cuestiones de la persona, más allá de lo estrictamente alimenticio, se debe destacar que los beneficios se notaron más en los hombres que en las mujeres estudiados. Es decir, que ellos, fuera de esta tendencia de vida, mantienen una diera mucho peor que ellas, y por eso el cambio es más notable al volcarse a este tipo de alimentación.
