Frente a un mundo cosmopolita, donde el estrés está asechando a cada uno de nosotros todo el tiempo, practicar una disciplina que permita relajarnos resulta una opción verdadera y digna de comenzar a brindarle su espacio en nuestra vida.
Hablamos sin lugar a dudas de Yoga, una disciplina que pretende unificar en su práctica el aspecto físico y mental, buscando unir el alma individual con el ser supremo, obteniendo grandes ventajas tanto en uno como otro campo.
Principales beneficios físicos
- La práctica del yoga fortalece los huesos, de allí que puede ser útil para prevenir la osteoporosis gracias a la ejercitación con movimientos lentos, pero fuertes.
- Por otra parte, mejora la presión arterial por lo tanto si tienes presión alta este es el ejercicio ideal para ti
- Facilita la circulación con lo cual tras haber realizado el ejercicio te sentirás renovada.
- No sólo los huesos sino también los músculos se ven fortalecidos con esta disciplina lo cual puede ayudar a prevenir artritis y dolores lumbares.
- Nuestro cuerpo adquiere mayor flexibilidad a medida que pasan los días y vamos poniendo en movimiento a nuestro cuerpo. Si bien en un comienzo puede que cueste realizar alguna postura, con la práctica, será muy fácil adaptar esa posición dado que tu cuerpo se vuelve mucho más flexible.
- Para quienes padecen de colesterol malo elevado nada mejor que esta práctica dado que reduce el nivel de azúcar en la sangre y el LDL así como facilita el aumento de los niveles de HDL o colesterol “bueno”.
- La capacidad respiratoria va mejorando con el tiempo, de ahí que se va logrando una inhalación de mayor volumen, lo cual permite relajar a tu cuerpo y mejorar el sistema.
- Finalmente mejora tu sistema inmunológico, así como tu salud mental a través de la relajación, permitiéndote reducir la incidencia de estrés y depresión y aumentando la serotonina del cuerpo que ayuda en la sensación de felicidad.
