Menos del 10% de los adolescentes de España practican el ejercicio físico recomendado para la salud y, lo que es aún más grave, un 25% no realiza ningún tipo de ejercicio físico. Así lo puso de manifiesto el «Estudio de Conductas de los Escolares Relacionadas con la Salud» realizado con más de 160.000 niños de 32 países.
El hábito deportivo entre los adolescentes españoles es uno de los más bajos, y son los jóvenes entre los 13 y 18 años los que registran un mayor nivel de sedentarismo. Este hecho conlleva consecuencias negativas, como son los datos crecientes sobre la incidencia de la obesidad y la diabetes infantil.
Como medida preventiva los profesionales aconsejan que, a partir del tercer mes, se fomente de forma lúdica la actividad para garantizar el desarrollo de la musculatura, mientras que entre los 12 y 36 meses los niños deberían realizar al menos 30 minutos de actividad física estructurada cada día. A partir de los seis años se ha de adquirir el hábito de realizar actividad física diariamente, por lo que se recomienda practicar varios tipos de deporte. Finalmente, la pubertad (entre los 10 y 16 años) es una etapa «fundamental» para consolidar los hábitos deportivos, ya que, según los expertos, durante el inicio de la adolescencia es cuando hay más riesgo de abandonar la actividad física, sobre todo en las chicas.