Siempre decimos que si tuviéramos que mencionar una práctica deportiva que se encuentre de moda en la actualidad, hablaríamos del Running. Por eso, miles de personas comienzan a diario a llevar adelante este tipo de entrenamiento, y por el mismo motivo, es que estos principiantes cometen errores que nosotros queremos repasar para que los mismos no vayan a sucederte.
Obviamente, el principal inconveniente tiene que ver con comenzar a hacer Running sin hacer una evaluación médica previa. Lo que sucede es que, aunque consideremos que somos personas completamente sanas, se trata de una actividad física que tiene sus riesgos extra, y puede desatar algunas problemáticas no conocidas relacionadas con nuestro corazón. Un buen examen físico a tiempo es la solución.
Otro problema sumamente común, es que quienes comienzan a hacer Running, muchas veces lo hacen acompañando a un amigo o conocido que ya tiene su propia rutina. Como es mucho más sencillo, nos adaptamos a ellas, y es probable que estemos haciendo un esfuerzo para el que no estamos preparados. Por eso, siempre conviene buscar un especialista que nos desarrolle una rutina para nosotros.
La zapatilla. A ver, la selección de la zapatilla es un tema que tiene mucho de marketing y poco de ciencia. Si te fijas en la cantidad de euros que cuesta una zapatilla que supuestamente ha sido desarrollada para hacer Running con las últimas tecnologías del mercado, entenderás un poco de qué va la cosa. Lo importante es que sea un calzado cómodo y que se adapte a los suelos que transites normalmente.
Por lo demás, algunos otros inconvenientes que se repiten, aunque de forma menos constante, tienen que ver con utilizar suplementos deportivos que no sean los aconsejados por los expertos, además de utilizar Internet y armarnos la rutina nosotros mismos, y por qué no, entrenar únicamente los fines de semana, con sedentarismo el resto de los días. Eso provoca, evidentemente, muchas posibilidades de lesiones.