Una nutrición saludable, es elemental en nuestra vida, la ingesta de los alimentos adecuados, hacen funcionar nuestro organismo de una forma regular y conveniente, previniendo su mal funcionamiento y por lo tanto las enfermedades.
Mire por donde se mire, el olvidarse de la azúcar es positivo para el organismo. Cuando consumimos azúcar blanco, miel… alimentos que son ricos en hidratos de carbono, se disuelven rápidamente en la sangre. Nuestro organismo reacciona inmediatamente y se produce un elevado ascenso del nivel de glucosa, nada más un instante de haberlos consumido. A continuación aparece la ansiedad, el deseo de comer algo dulce, comenzando otra vez el ciclo del aumento del ascenso de la glucosa. Esta razón es por la que se debe alejar la azúcar. Los deseos de administrar glucosa al organismo, se pueden contrarrestar con las frutas o alimentos con fibra, pero existe una contradicción, ya que los refinamientos alimenticios desechan la fibra, por ello el consejo de consumir alimentos integrales. La fibra da sensación de saciedad, no aportan calorías y contiene magnesio (protector de la diabetes). Son alternativas que nos pueden ayudar a eliminar de nuestra dieta la azúcar, negativa para una vida saludable.
La ingesta de carne, también hemos de reducirla, no eliminarla, esto sería un error, pero sí controlar su consumo, incluso está el consejo de administrarla de cultivo biológico. Las carnes contienen mucha grasa saturada, lo que conlleva a elevar el colesterol. Las proteínas de este alimento, pueden sustituirse por las de origen vegetal. Soja, legumbres, cereales… contienen estos nutrientes.
