En todo proceso de adelgazamiento no pueden faltar la actividad física. Caminar, correr, andar en bicicleta y hacer ejercicios localizados, ayudan a bajar de peso y tonifican la musculatura.
Las actividades aeróbicas mejoran las condiciones del corazón y pulmones y promueven la quema general de grasas. Los especialistas recomiendan hacer actividad sin preocuparse por la distancia o el tiempo que transcurre. Por ejemplo pedalear o correr, cuatro veces por semana. Lo importante es no es no sobrepasar el 70 por ciento de su frecuencia cardíaca máxima. El cálculo es muy fácil. A 220 tiene que restar su edad, luego multiplíquelo por 70 y divida por cien. Si tiene 30 años, trate de mantener el ritmo a 133 latidos por minutos.
Para fortalecer los músculos y cambatir la flaccidez se recomienda la actividad aeróbica. Cumpla con los procesos de precalentamiento y enfriamiento al terminar la serie de ejercicios que tiene programada.