El desayuno, es la comida más importante del día, pues con ella, nos nutrimos de energía para realizar las actividades durante todo el día, con esta comida, importamos la tercera parte de las calorías necesarias para que funcione el organismo con toda vitalidad, de ahí, que se le de tanta importancia.
Para bajar de peso, nunca hemos de saltarnos el desayuno, esto sería un tremendo error, pues el cuerpo no consume la grasa que el cuerpo almacena, sino consume el músculo, produciendo así la flacidez.
Un desayuno completo, ha de tener carbohidratos, cereales, lácteos y fruta, por lo tanto, un buen menú, sería: pan, galletas, leche o queso y fruta. Azúcar, frituras, gaseosas… hemos de dejarlas a un lado.
A continuación, te presentamos dos tipos de menú de desayuno, pues con los nutrientes arriba indicados, puedes combinar numerosos alimentos. Toma nota:
-este es muy indicado para las estudiantes o trabajadoras que les gusta conservar la línea. Es de sencilla preparación. Yogurt desnatado con frutas, cereales, pasas… puede prepararse la fruta picada, preferiblemente que no sea demasiado dulce. Si prefieres pasas, procura que no tengan grasa ni sal. Para complementarlo, a media mañana, toma un huevo pasado por agua
-si te gusta tomarte tiempo para preparar el desayuno y disfrutarlo con la familia, un zumo de frutas, es ideal. Este te ayuda al cuidado de la piel y te mantiene activo toda la mañana. Procura que una fruta sea amarilla (naranja, limón). Puedes incluir en el zumo, algún huevo, zanahoria, leche desnatada, germen de trigo… Para un mayor complemento el pan con queso y para terminar una infusión caliente
fuente: linea y forma