El masticar los alimentos es otra de las cuestiones básicas para llevar una vida sana y una dieta adecuada.
Una de las razones por la que hay que masticar bien, es que nuestro paladar puede saborear más los alimentos que ingerimos, el comer sin saborear quita el gusto de muchos alimentos que pueden convertirse en un placer, podremos sacar todo su sabor sin necesidad de engullir, además no es nada agradable ver a una persona engullir como si la vida se le fuera con ello, hay que tener presente que la calma está ante todo.
El masticar lentamente, hace que la digestión se convierta en menos pesada. Los alimentos integrales son más difíciles de masticar, algo muy favorable para ellos, pues hay que comerlos más lentamente y eso nos beneficia, aparte de su gran cantidad de fibra que nos aportan.
Masticar bien es aportar al estómago un trabajo bien hecho, es como complacerle y hacerlo más saludable y sano.
Otra cuestión de suma importancia es la orden que tu cerebro te pide que pares de comer porque ya tienes suficiente, este tarda unos veinte minutos en dar la orden y si comemos deprisa, sin masticar, sin gustar la comida, es el motivo por el que después pasa factura el sobrepeso, ya que si lo hacemos lentamente, el cerebro manda la orden de suficiente cuando lo ingerido es la cantidad necesaria para nuestro organismo, con ello no sentiremos sensación de pesadez, como a punto de estallar, en conclusión un auténtico atracón de comida, un punto negativo para tu vida sana.
Fuente: salud y medicinas