Tras una reciente investigación se ha estudiado que los estados emocionales de tristeza provocan reactividad autónoma, que predispone a la constricción de las vías respirarorias en el asma. Una hipótesis corolaria sería que los estados emocionales positivos (por ejemplo, la alegría) provocan efectos opuestos. Veinticuatro niños entre 8 y 17 años con asma de moderado a grave, vieron la película ET mientras se registraban sus ritmos cardíaco y respiratorio, así como la saturación de oxígeno. Se identificaron y preseleccionaron escenas determinadas para provocar tristeza, alegría y una mezcla de tristeza y alegría. Se analizaron los auto-informes de las emociones y los índices de respuestas fisiológicas. La tristeza se asoció con una mayor variabilidad del ritmo cardíaco e inestabilidad de la saturación de oxígeno en comparación con la alegría, dándose resultados mixtos con la mezcla de alegría y tristeza.