Hay muchísimas afecciones inertes, silenciosas que nos atacan sin darnos cuenta, estamos expuestos a ellas y las ignoramos.
El uso del móvil incrementa el dolor de cabeza, nuca, oídos y del dedo pulgar por su uso en los SMS.
Y qué decir del riesgo de las llamadas o respuesta al estar al frente del volante.
Los teléfonos móviles han de sostenerse a la altura de los ojos, evitando inclinar la cabeza hacia abajo más de diez minutos.
Las vibraciones fantasmas para evitar las molestias de las llamadas están afectadas por un síndrome que produce alteración en la sensibilidad.
El móvil tipo Blackberry produce adicción. Los usuarios de estos aparatos se conectan a Internet, visitan blogs, leen en correo, sin darse cuenta de que están haciéndolo.
Hay personas, en especial jóvenes, que duermen con el móvil bajo la almohada, contestando durante la noche a llamadas y mensajes, esto es un mal hábito que produce alteraciones del sueño e impiden el descanso nocturno.
El Mp3 produce la sordera al usuario, pues en ocasiones no se escucha con el volumen adecuado. El uso de los auriculares aumenta todavía más esta afección. Su uso correcto debe ser moderado y permitir oír el ruido de la calle.
La molestia del dedo pulgar se deben a la repetición de los movimientos en la escritura de mensajes, las pulsaciones en el teclado del móvil producen el dolor, cuya función no es esta en nuestro organismo. En casos exagerados llega a producir parálisis en dicho dedo.
El abuso de la Wii, es llamado “Wiititis”, provoca dolor en brazos, muñecas, hombros…debido a la repetición de acciones que entraña este juego.
Fuente: salud